¿Cómo dar calor a los niños de Siria?
El frío es uno de los peores enemigos de los niños de Siria estos días. Te contamos qué puedes hacer para protegerlos de esta amenaza.
Esta noche los termómetros en Siria apenas marcarán un par de grados por encima de cero. Y mañana. Y pasado mañana. El invierno ha llegado para quedarse en este país castigado por casi 6 años de guerra.
Los niños de Siria afrontan las frías temperaturas como lo que son: unos valientes. Las escuelas están destruidas, pero ellos llevan sus propias mantas para tapar las ventanas rotas y poder seguir estudiando. También ayudan a sus familias a recoger madera con la que poder calentar sus hogares.
Sin embargo, el frío es una grave amenaza para estos niños. Con las bajas temperaturas llegan la hipotermia, la neumonía y otras enfermedades respiratorias muy peligrosas para su salud.
Tú puedes ayudar a los niños de Siria
Quedan muy pocos lugares cálidos donde los niños de Siria puedan protegerse. La guerra se los ha llevado todos. Pero, con tu ayuda, en UNICEF podemos dar a estos niños el calor que necesitan. ¿Quieres saber cómo?
- Conoce hasta el último detalle cuál es la situación de la crisis en Siria. Más de 8 millones de niños necesitan ayuda humanitaria urgente. ¡Nos necesitan!
- Cuéntale a todo el mundo lo que están viviendo los #niñosdeSiria. Explícales que toda una generación está en juego. ¡Tú puedes ser la chispa que encienda la mecha de su solidaridad!
- Hazte socio de UNICEF porque, con tu aportación periódica, podremos adquirir los bienes y servicios más necesarios para los niños en el momento adecuado. Este invierno, queremos dar ropa de abrigo y mantas a 740.000 niños en Siria. ¿Te unes?
- Recuerda que, aunque lo apreciamos enormemente, no podemos aceptar donación de ropa de abrigo debido a la naturaleza de nuestro trabajo. En una situación de emergencia, la recepción de donaciones en especie puede complicar las operaciones logísticas de las organizaciones y agencias humanitarias.
Ahmed ya tiene ropa de abrigo
Este es Ahmed. Está feliz porque se acaba de probar la ropa de abrigo que nuestros compañeros de UNICEF en Alepo le han dado... ¡Y es justo de su talla!
Ahmed y sus cuatro hermanos perdieron a sus padres en la guerra. No tenían familiares cerca que pudieran hacerse cargo de ellos, así que huyeron del este de Alepo con unos vecinos.
Los niños como Ahmed, que han tenido que huir de sus casas por la violencia y los enfrentamientos, son especialmente vulnerables al frío. En muchas ocasiones, los niños desplazados no tienen alojamientos adecuados para protegerse del frío, por lo que quedan expuestos a las bajas temperaturas durante todo el día.
En UNICEF estamos trabajando para que cada vez haya más niños en Siria como Ahmed. Y ahora, con tu ayuda, ¡podremos llegar mucho más lejos!
Solo nos faltas tú para seguir salvando la vida de muchos niños
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