Conflicto en Siria: las familias asediadas luchan por sobrevivir
Así viven los niños sirios y sus familias en ciudades atrapadas por la guerra.
Un juguete entre los escombros de un edificio en el este de Ghouta.
"El nivel de destrucción y sufrimiento son impactantes. Es difícil imaginarse la vida en estas condiciones".
Estos son los primeros pensamientos que me vinieron a la mente cuando llegué a la "zona desmilitarizada" a las afueras de Al-Nashabiyeh, una localidad bajo asedio en el este de Ghouta, en el Damasco rural.
Los árboles quemados y los edificios dañados decoraban las calles mientras entrábamos en la ciudad para entregar ayuda humanitaria como parte de un convoy de las Naciones Unidas y la Media Luna Roja.
Conflicto en Siria: pueblos fantasma
Era la primera vez que la ayuda humanitaria llegaba a la zona desde que el conflicto en Siria empezó hace más de 6 años. Yo acompañaba el convoy como director de agua, saneamiento e higiene en UNICEF Siria.
Llevábamos medicinas, alimentos, material escolar, artículos de higiene, ropa infantil suficientes para 7.200 niños y familias de Al-Nashabiyeh.
Algunas personas de la comunidad nos dijeron que, de los 23 pueblos en la zona asediada del este de Ghouta, solo se puede vivir en 6 de ellos en medio de la violencia y la destrucción.
Las familias del lugar viven en un miedo constante, desplazándose con regularidad de un pueblo a otro para escapar de la violencia ¿Te imaginas tener que estar constantemente mudándote con tus hijos?
"Cuando hay enfrentamientos, nos vamos; cuando se calma la situación, volvemos", me contaba un hombre para explicarme la vida de desplazamiento a la que niños y familias se enfrentan cada día.
Niños sirios: años sin ir al colegio
La mayoría de escuelas han sufrido daños o han sido destruidas, lo que ha obligado a los niños a dejar su educación parcial o totalmente.
Algunos de los niños que conocí no habían entrado en un aula en más de 2 años, mientras que otros solo iban a la escuela de forma esporádica.
Padres y profesores han trasladado todas las escuelas que estaban cerca del frente de batalla a casas y sótanos para proteger a los niños y darles la sensación de que es un día normal de colegio.
Pero todavía hay una gran escasez de profesores y libros de texto, lo que pone más difícil para los niños continuar con su educación.
Conflicto en Siria: sin medicinas, sin doctores
También visitamos el único hospital operativo en Al-Nashabiyeh (o lo que queda de él).
Está prácticamente destruido por los enfrentamiento y solo quedan unos pocos doctores que operan en el sótano y dan a niños y familias la atención sanitaria más básica.
Les falta material médico y más personal, pero hacen lo que pueden para salvar vidas.
Ayman posa frente al puesto de combustible de su padre.
En pleno centro de Al-Nashabiyeh, hombres y niños cogen agua para sus familias en una bomba manual que extrae agua de los pozos.
"Sabemos que el agua está contaminada", me decía un padre. "Solo la utilizamos para lavar".
Las familias están comprando agua potable por un precio hasta 7 veces mayor que otras zonas de Siria. Además, el agua se filtra con maquinaria poco fiable, por lo que no es del todo segura.
Tampoco pueden hervir el agua (que sería una alternativa más barata a desinfectarla para su consumo), ya que apenas hay combustible y el que hay es muy caro. En su lugar, la población a veces reúne bolsas de plástico y las quema.
Niños sirios: ¡acceso humanitario ya!
A pesar de la escasez y la desnutrición, es impresionante la fortaleza y determinación de los niños por sobrevivir y tener una infancia normal.
Me contaron que una familia de 5 miembros sobrevivió durante 4 semanas con unos ingresos de 16 euros que habían ganado cultivando y vendiendo algunos productos.
Esta es, a menudo, la única manera de sobrevivir para los niños y familias que viven en el este de Ghouta, una zona que antes era conocida por producir y suministrar frutas y verduras para barrios enteros de Damasco y sus alrededores.
La intensidad del sufrimiento del este de Ghouta es inimaginable. La violencia en zonas tan pobladas como estas ponen a miles de niños en peligro y provoca desplazamientos masivos y bajas civiles.
Hospitales, escuelas y patios se han trasladado a los sótanos por miedo a convertirse en objetivo. La falta de comida, agua y medicinas pone a los niños en grave riesgo.
Necesitamos acceso libre e incondicional en todo el país para poder llevar ayuda humanitaria a estos niños que tanto la necesitan, también en las zonas asediadas. ¡Ayúdanos a ayudar a los niños de Siria!
La vida de millones de niños sirios está en riesgo
¡Dona ahora!